El cine por el Cine

En estas épocas de reflexión en las que lo que cuenta a la hora de hacer un buen examen o presentar un trabajo de notable, es la capacidad de abstracción para sacar de donde no hay una conclusión válida y ostentosa, me dejo llevar por la inercia del pensar y acabo a final del día con las neuronas agotadas.
Hoy toca cine.
¿Qué le está pasando al cine actual? ¿En qué hemos cambiado, espectadores y realizadores para que se note tanto, tanto la evolución de las generaciones?
Abierto el tema en el foro sobre cine que suelo frecuentar, me gustaría hacer una especulación acerca de las razones que, según mi opinión, han llevado al Cine (con mayúsculas) al punto en el que hoy se encuentra.
Soy de la peculiar opinión de que en la actualidad el Cine importa a muy poca gente. No porque se llenen las salas de cine y la industria en cuestión se enriquezca por momentos, es una señal de que el Cine evoluciona positivamente. Los productos que se ganan los mejores puestos en las carteleras no dejan de hacer notar la dudosa calidad cinéfila que interesa a la masa. Ésta va al cine esperando encontrar un lugar cómodo, tranquilo, acondicionado, en el que pasar las tarde del fin de semana y… poco más. Pagan por el rato que les proporciona la sala y, normalmente, evitan los juicios críticos acerca de la película que han visto, que, como apuntaba un forero, seguramente eligieron a última hora, a suertes, y después de haber comprado las palomitas y las bebidas. Queda por tanto reducido a un rito y costumbre social. En el Cine de hoy en día, lo que menos importa es la película. Y ese es un gran problema sobre el que debemos lidiar.
¿Existe por tanto un criterio por el que el espectador de la masa se guie a la hora de contribuir a la industria cinematográfica? ¿O ese criterio que al que me refiero ha perdido todo su significado, pasando a convertirse en la nimiedad de aquellos que renuncian al espíritu crítico del cine como arte?
Pienso que la clave está en que existen dos clases de espectadores: los que les gusta el cine y los que dicen que les gusta. Los primeros, una minoría, se recogen en pequeños círculos bohemios, ciertamente elitistas, que ven en el cine el Arte que sigue siendo, pero que, sobre todo, fue hasta hace unas décadas. Estos culturetas buscamos en el cine algo más que puro espectáculo visual y sonoro y dedicamos una buena porción del visionado a buscar en los fotogramas algo más allá de una cara bonita.
Los segundos, todos los demás –porque, sepan amigos, que hoy no existe gente que admita abiertamente que no le gusta el cine-, son los que han hecho del mismo lo que es hoy –para bien y para mal-, más que nada porque son los que, en su agrupación mayoritaria como gran colectivo, alimentan al cine y pagan por él masivamente. Son el grueso de sus ingresos brutos y es a ellos a quien atienden los productores a la hora de dar via libre a un proyecto o cortar las alas a otro.

Miremos al cine español. ¿Qué le está pasando, cuál es su situación actual y cuál el problema fundamental? Que es una puta mierda, aclama la multitud. Pues sí, y no.
Sí, porque efectivamente las últimas películas que más taquilla se han llevado consigo me parecen una basura de principio a fin. Porque al cine español le faltan más Valverdes, Cesc Gays, Vegas, Medems… y menos Resines, Amenábars y Coronados. Porque ya estamos hartos de que todas sean iguales, de tanta guerra civil, tanto puterío y tanto encasillamiento.
Pero no, el cine español no es todo mierda, ni toda mierda es cine español. Hay que saber buscar (criterio, te aclamamos) y hay que saber elegir. Hay grandes películas realizadas en los últimos años que merecen un lugar privilegiado en nuestras listas de favoritas. Son películas que, si bien no ha visto ni un 10% de la población nacional, siguen siendo españolas, pero además diferentes, frescas, nuevas, BUENAS.

Lo bueno y alentador es que sigue habiendo gente que se interesa de verdad por el cine y aquí internet juega un papel fundamental. Las generaciones que nos preceden, nuestros padres y tios, crecieron en una época dorada para el cine y sin embargo, aquellos que se interesaron por él tuvieron que recurrir al esfuerzo y al tesón para aprender sobre él. Grandes libros se escribieron décadas atrás y sobre todo, la crítica (ah, mis cahiers) era lo que debió ser siempre.
Hoy, en cambio, cuando a todos nos gusta el cine, y a los que realmente nos importa y tratamos de estudiarlo con detenimiento, se nos menosprecia. Decir que alguien entiende de cine es tan absurdo como lo es hoy estudiar cinco años para ser periodista. El Arte del cine y todo lo que trae consigo ha sido banalizado hasta la vergüenza ajena. No obstante no cesamos en nuestro interés.
Decía que es hoy, con las nuevas tecnologías de la información, y en concreto con internet y sus foros, sus revistas electrónicas, páginas web temáticas y sobre todo, los blogs, estamos contribuyendo al nacimiento de una nueva red de conocimiento. Aunque haya mucho por mejorar, no deja de ser este el espacio ideal para formarte un criterio y juicio propio, para instituirte como mejor persona a nivel cultural y sobre todo, para aprender de lo que los demás pueden aportarte.
No soy más que una hormiga en el mundo de la cinefilia, pero lo poco o mucho que sé de este arte lo he aprendido gracias al interés que me han suscitado primero los foros y la gente que en ellos he conocido, y después gracias a las bitácoras que me mantienen al día en cuanto a novedades se refiere.
No podemos pues cambiar el mundo -y mucho menos tratar de hacerlo a nuestro antojo- ni las generaciones que nos sacan ventaja, pero sí que debemos tratar de redireccionar los hábitos de consumo de Cine antes de que se cotice más altas las palomitas que la entrada propiamente dicha. El Cine es muy grande, ábramos sus puertas.


[Por cierto, hablando de abrir horizontes y conocer el Cine en su plenitud... la Filmoteca de Madrid, el gran paraíso de los cinéfilos de pro, nos trae este mes una oportunidad única: conocer la obra fílmica del famosos fotógrafo William Klein. Yo de momento, flipo en colores con el tío. Ya me prepararé algún comentario en los próximos días]