busca entre mis delirios

domingo, enero 29, 2006

Brokeback mountain, 2005

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Pensé que iba a gustarme. Llegué, incluso, a creer que me maravillaría. Pero al final, y después de haberla visto, me he dado cuenta de que se trata, otra vez más, de un revuelo innecesario que siembra muy potentes las expectativas y que acaba consiguiendo que al público se le queden ganas de más.
Lejos de ser una mala película, contiene lo esencial para despertar el interés: un amor homosexual difícil y peligroso entre dos chicos que crecen en la década de los sesenta en la profunda América y que se encuentran ante el mayor problema de sus vidas, ¿cómo salir adelante y salir a salvo cuando ya has entrado en el juego?
Poco convencional historia en las pantallas de cine, rodada sin tensión y sin ritmo, que puede llegar a cansar en algunas ocasiones y a aburrir en otras pocas. Personajes definidos pero escasamente justificados. Amor consumado, pero raramente entendido y demostrado. Una pasión que podría confundirse por los más puritanos en mero sexo, vicio y desahogo cuando se supone que se trata de algo mucho más profundo.
En fin, que es una película que puede merecer la pena ser vista (por sus paisajes, su fotografía, su música, Michelle Williams, Jake Gyllenhaal) pero que para nada debería ser considerada como un tótem en el cine contemporáneo. Y mucho menos, de las historias de amor homosexual.

viernes, enero 27, 2006

... a tí

Me levanto esta mañana y pienso en ti.
Sé que no ha sido por ningún sueño tenido, pues no eras tú el protagonista.
Quizá fuera por la canción que disparó la alarma de las ocho de la mañana, quizá me recordara a ti, o a algún viaje, o algún delirio de habitación, o simplemente mi mente lo asoció a cualquiera de los tantos momentos vividos.
Quizá fuera que todo me huele a ti en esta habitación.
La almohada donde duermo cada noche esperando la llegada de una nueva mañana, y donde hoy me despertaba dándole la bienvenida a ésta de hoy, es la misma donde cada tarde dejas caer tu cabeza incitándome a ti, a tenerte más cerca. Donde reposas, donde piensas, donde hablas, donde mimas y donde amas. Donde pides amor y donde yo te lo doy.
El butacón donde te sientas cuando vemos alguna peli tiene tu forma corporal dibujada en su asiento; un molde perfecto para una réplica imposible.
El vaso en que bebiste ayer, quedó en el mismo preciso sitio donde lo dejaste y yo, invadida por esta ola de calor interno, sorbo con cuidado un par de gotas, que también me saben a ti.
Y me pregunto si es que estás en el aire, en el agua, en las sábanas y en la silla o directamente formas parte de mis nervios olfativos y de mi boca. Si esta habitación está perfectamente diseñada para amarte o si te las has apañado para que mire donde mire me falte tu figura cuando no estás para sostener en pie estas cuatro paredes.
El caso es que me encanta el olor que dejas en mis sábanas, el de mi camiseta que te pones cuando llueve mucho y se te moja la que llevabas debajo, el poso que imprimes en mi butaca favorita y el saborcillo que mi imaginación recrea en el borde del vaso. Yo huelo y sepo a ti. Y hoy no quiero oler nada más, no quiero que otros sabores me quiten el tuyo. Daria lo imposible por que ninguna mañana me levantara sin sentir que la noche anterior estuviste en ese lado de la cama, que me besaste a este lado de mi boca y que tocaste en este lado de mi corazón.

martes, enero 24, 2006

The secret life of words

Cuando la voz no deja salir a las palabras.
Cuando éstas guardan en sí mucho más de lo que parecen mostrar.
Cuando sus secretos son mayores que su potencia y realidad.
Cuando se quedan dentro de una misma, oprimiendo y frustrando.
Cuando es necesario soltarlas.


lunes, enero 23, 2006

well, I've got a problem

Yeah, my schizophrenia is getting worse these last days.
Delirante is deliring stronger and more powerful than never before.
You know what? I think is the fever of my illness (don't worry, isn't big deal, no more than a regular cold), but, anyway, is funnier if i think i'm turning this way forever.
Well, if you've not noticed yet, i've got a problem with language. I write in english, but not only that.

Also, I speak in english.- every single time a british (and the stupid accent of them that bothers me so much) or an american cuttie girl -or sexy boy- come to the cinema where i work to ask for a ticket for BROKEBACK MOUNTAIN (it seems easy to read but when you try to pronounce it, the thing gets worse). I realised that from now i am the oficial ticket-seller-for-nonspaniards. But i'm not being payed better.

In addition, I read in english.- yeah, sunes, i keep reading this crazy and pervert book of Mary Gaitskill about sex and isolation. I read, and i read, but for the moment, it has no end. And, if it doesn't seem weird enough, i can tell you that i'm a prisoner of amazon.uk. The paradise of working-and-payed Laura. My perdition.

More... I listen to music in english.- i don't know how i do that, but every song that my computer or ipod plays is 100% of the times in english. It doesn't matter if it's come from u.s or u.k or spain, but always, always, is song in english. Tom Waits, Leonard Cohen, Lonely Joe, Marlango, Lanegan, Ferdinand, Mando Diao can confirm it.

And so, I watch in english.- films, series, everything. All the mass media products i'd consumed these last days' come from outside, by the net and always in english. So, sex in the city, lost, the l-word (amazing), films coming... everything swallowed and sometimes without the sweetness of the help of a few subtitles.

In short, all of this crap has obvious consequences in my real live. I get suprised myself thinking inside my brains and senses in this fucking language. Or trying to figure arguments out, or just simply dreaming in the middle of the night. My soundtrack is written and thought in english... isnt's that cool?!

So, yeah, I'm crazy. Crazy funny, no crazy dangerous. 'Cause maybe I look like a junkie (and now it increases, because of the lost of my voice since yesterday) but in spite of physical appearances, I'm a good person. Promise.

lunes, enero 16, 2006

La mujer tranquila

Empieza una época. Los exámenes.
Si, parece tópico. Parece que sólo nos afecta a nosotros. Pero no. Que va.
Afecta a los padres, a los hermanos, a los amigos, a las parejas. Porque nos volvemos insoportables, porque nos roban el tiempo y el humor, porque nos aceleran y nos agotan, nos desgastan y nos excitan. En todos y cada uno de los sentidos.
Así que sí, comprendan por favor al pobre estudiante, pero apártense de él cuando le vean caminar con prisas hacia ustedes. Un peligroso contratiempo se cierne en torno suyo.
Y para calmar ánimos, a un lado y al otro de la Universidad:

Empieza The L-Word en estados unidos. El pasado domingo emitieron el primer episodio de la tercera temporada. Ayer el segundo. De momento un comienzo potente que pinta mejor que la segunda, que ya de por sí era cien veces superior a la primera temporada. Un alivio poder comprobar que la serie vive y no se anquilosa en relaciones, que cambian sus personajes como si vivieran de verdad y que de algún modo, evoluciona todo junto. Por fin algo de entretenimiento digerible y disfrutable, en algunos casos.

Sigue Lost.
Segunda temporada, pero ya de vuelta después de su parón de navidades. El marketing es lo que tiene; hay que estirar el chicle mientras esté blandito. El caso es que siguen ahí los pobres desgraciados, perdidos en medio de quien sabe qué. Y cada vez lo van teniendo más chungo. Todo negro lo ven algunos… Muy guay el arranque de motores. A ver cuando encuentro tiempo para reengancharme y doparme hasta que no pueda más.

Marlango
Abre gira de nuevo. Toca la costa levantina, así que Kesher, no me seas y hazles una visitilla, que pasan por Murcia como veinte veces.
25_02_06 / Murcia. Auditorio V. Villegas
17_02_06 / Molina de Segura (Murcia). Teatro Villa de Molina
03_02_06 / Almería. Auditorio M. Padilla
27_01_06 / Santander (Cantabria). Palacio de Festivales de Cantabria
21_01_06 / Yecla (Murcia). Teatro Concha Segura
20_01_06 / Lorca (Murcia). Teatro Guerra

Erasmus
A rezar, que alguien me enseñe por favor. Hay que poner miles de velas a los santos por que no den demasiadas plazas a quien no debe irse de la facultad por nada del mundo y en cambio que deporten con rapidez y eficacia a otros especímenes menos soportables. Que una cosa es tener la ilusión de conocer mundo y otra muy diferente es irte todo un año a tomarporelculo de Madrid y que nos den por saco a los demás sin ell@s en la facultad. Vamos, como si hubiera muchas más razones por las que voy allí todos los días (ji) si no es la vida social.

Y más cosas ¿eh? Que no me olvido que tengo que regalar a sunes la edición que acaba de salir de Tierra de Abundancia. Que llega a cines dentro de poquito la última (Melissa P.) de María Valverde, esta vez haciendo de italiana salidorra en plan Lolita. Que antes de eso pasa por la taquilla la última de Haneke, Caché, a cagarse de miedecillo psicólógico. O la de Brokeback Mountain, la de los dos gays vaqueros, que como poco, puede estar curiosilla. Y los Goya al caer.

sábado, enero 14, 2006

(Sonrisa)

Qué fácil de alegrar es el ser humano. Qué poco hace falta para que se le despierte un tímido gesto que muestre el confort que una estupidez ha producido en su estado anímico. Qué sencillo desmitificar los grandes actos y qué grandioso disfrutar de las pequeñeces.
6.40 AM. Madrugas. Corres y te dejas la mitad de las cosas importantes que debías llevar contigo a la facultad. Te tragas una hora de agobiante viaje en metro (el mejor del mundo, dicen, já). Llegas con la hora pillada al culo a una clase eternamente intensa, aunque irremediablemente interesante. Y de pronto te das cuenta de que sufres en esos instantes una mezcla de sueño contenido y amodorre calorífico, culpa seguramente, de los 24 grados que marca el termostato del aula. Y entonces sales de clase, te metes de nuevo en el metro conectada a Tom Waits, en busca de alguna droga que te saque del atontamiento temporal y mañanero. Y entonces entras en una cafetería que hace un año frecuentabas bastante pero que desde entonces se ha convertido en territorio desierto. Y dentro, el barman aquel tan majo que por entonces solía ser el encargado.

- Hola, ¿qué tal? ¿cómo va el día?
- Bien, bien, aquí estamos...
- ¿Qué te pongo?
- El café más cargadito que tengas, fuerte, fuerte y negro, negro
- Marchando
...
- Pues aquí tienes, qué aproveche, "Laura"
- (Sonrisa)

miércoles, enero 11, 2006

Lo moderno que no es cool

No, tranquilo, señor toldo, que esta no es una vil manera de robarle el argumento para una futura actualización por su parte sobre la diferencia de concepto y término entre moderno/de moda y cool –usado como descalificativo-.
No, éste es más bien un post reivindicativo, porque no todo lo que se lleva mola. O mejor dicho, porque si ciertos actos, comportamientos y/o gustos son estrictamente consecuencia de una moda, si sólo se hace porque se lleva, porque aumenta puntos en tu ranking personal de coolidad y te va a convertir en el/la más guay del grupo, entonces hacen rechinar dientes.

Vale hay cosas que sí que molan… las que se refieren al estilo, por ejemplo.

Para ella: Camisetas de rayas –blanco-negro-rojo-azul-, botas altas, faldas eternamente largas –o intensamente cortas-, pelos cortos, medias melenas con flequillos poperos, bolsos grandes, maquillaje sutil con predominio de negros en los ojos. Todo muy sixtie, todo muy frenchie.

Para él: Pantalones bajos, muy bajos, sudaderas de cremallera, chaquetas de pana bohemias, bandoleras anchas, converse en los pies, pelo corto -pero no demasiado-, despeinado-pero pretendidamente, con cera y estilo-, barba de tres días, patillas largas, ipod conectados de su bolsillo a sus oídos, perfume eau-de-desodorante. Todo retro.

Pero en cambio no mola nada…

- ser de derechas porque es lo que va contracorriente
- estar de acuerdo con decisiones y protestas que organizan desde ese lado de la politica y a través de organizaciones de dudosa calidad moral
- ir a las manifas del foro de la familia en plan coña porque queda mazoguay
- estar de acuerdo con ideas que creíamos bajo tierra tales como la pena de muerte o la expulsión de todos los inmigrantes que haya en cada rincón de este nuestro país
- empezar a hacer cosas demasiado temprano (en edad y circunstancia) porque es considerado progre (sexo, drogas y rock&roll)
- convertirte en un ser alienado socialmente porque la moda te mueve a ello: decir que eres bisexual (¡y no serlo!) porque de otra manera ya pareces tener algo en contra de todo el enorme concepto de la homosexualidad, decir que eres fan de Franz Ferdinand o de los Beatles porque si no ya no eres de este planeta, ver el cine en versión original -y en la filmoteca, los verdi o renoir- porque si no eres un inculto, decir que eres republicano porque si no te linchamos.

Y cosas así...

lunes, enero 09, 2006

Eleven hours (Lonely Joe)

eleven hours
eleven days
but I'm still feeling the same way
'cause if you open up your heart
I'm sure there's parts of me inside


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sábado, enero 07, 2006

tip_toe (Marlango)

that time when you can hear footsetps and deep breathing...
that time when shadows grow, when sleeping pills hold me like a baby...
that time there's nothing you can do, nothing you cand mend, all is still and full


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miércoles, enero 04, 2006

És que si (Astrud)

He decidit que tot depén de mi,que el que em passa i el que penso són una mateixa cosa (una mateixa cosa)


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...I si després dius que no tinc raó potser haurem d'admetre que tu, que tu ja no existeixes

martes, enero 03, 2006

Planes de Batalla (Nosoträsh)

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Y es que hace tiempo que empezó sus planes de batalla
Y es que hace tiempo que empezó su estrategia canalla

lunes, enero 02, 2006

¡¡Soy una paella!!

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Esta idea es propiedad intelectual de Papa Oso. Prohibida la reproducción total o parcial de su contenido sin el permiso del autor.

Hola, soy una paella.
Tengo metro sesenta y nueve y 47 kilogramos de arroz del que no se pasa, de gambitas frescas, pollo adobado, conejo troceado, costillitas y falda, pimientitos (rojo y verde), verduritas varias (judía, judión, cebollita, alcachofa, tomate, ajo –del que no repite ni deja sabor de boca-), rape, almejitas, chipirones, calamares. Todo bajo el toque de un azafrán que no puede faltar. Soy una paella, de carne, de pescado y vegetal, pensada para todos los gustos.
Y soy toda vuestra. Estoy recién hecha a cualquier hora del día. Humeante y calentita, con su caldito jugoso y apetitosa a los sentidos.
Vosotros tenéis la cuchara y yo os doy un plato. Si tenéis hambre, os acercáis a mí y tomáis de mi paellera lo que más os convenga. Vosotros ponéis los límites. Igual no os gusta la alcachofa, o quizá odiéis el pescado. Vuestro cubierto elige por vosotros lo que os llevaréis a la boca. ¿Que solo queréis un trocito de pollo? Perfecto. ¿Qué preferís daros el atracón, pues también? Es una paella que no se acaba nunca. Nuestra cocina está abierta veinticuatro horas al día y no descansa en festivos. No dejará de haber paella en ningún momento por mucho que comáis.
Y yo disfruto viéndoos comer. Y si encima os gusta lo que probáis y decidís repetir, ya es la leche.

Todo esto suena realmente divertido si pensamos sólo y exclusivamente en el sexo (calentita y caldosa quizá sean dos adjetivos que contribuyan a verdosear el comentario, lo asumo). Pero es algo genial si se aplica todas las relaciones y de cualquier tipo que se tienen en la vida diaria.
Es algo que nos agobia muchísimo. No saber dar a la persona lo que quizá esté queriendo. A partir de ahora, esta idea de Papa Oso debería ser considerada por muchos. Que no se trata de dar, se trata de ofrecer. Que cada uno tome de ti lo que quiera, lo que le convenga, o lo que le apetezca. Si sólo quiere conversación amigable, perfecto. Si quiere compañía, también. Si quiere un abrazo, un hombro donde llorar, un oído al que confesar. Si quiere un masaje, una caricia, un gesto reconfortante. Si quiere un beso, dos, tres, todos los que le quepan en la boca. Si quiere un achuchón, si quiere disfrutar, si quiere hacerlo contigo. Todo está bien.
Sé que huele a Papa Oso, sé que es demasiado atrevido, pero quizá sea la clave para simplificar las cosas que nosotros agrandamos sin darnos cuenta, y que al hacerlo, estropeamos para siempre. Nos agobiamos con pequeñeces que para nosotros son un mundo, y a veces hasta nos deprimimos cuando alguien nos ha usado como paella, tomó un plato y se fue. Y nos duele. Y lloramos.
Papa Oso tiene una receta que quizá ayude a que no nos vuelva a pasar factura los efectos de una mala digestión.
Quien quiera, que la use. Quien no, siempre quedará el almax forte.