busca entre mis delirios

martes, marzo 06, 2007

Lo que me dejo

Rojo_azulado:Azul_rojizo


Se escriben estas letritas desde el asiento del ala de un avión que contempla anochecer Sevilla a través de la diminuta ventanilla de cristal. Se suavizan las palabras con la mezcla de timidez por ser leídas y melancolía por ser recordadas. Se me acaba el viaje cuando el avión comienza a rodar por pista. Y como suele suceder en estas ocasiones, comienzo ahora a hacer recuento de lo que me he dejado atrás. Como por ejemplo todas esas fotografías que no saqué, bien porque no se hicieron, bien porque mi cámara no supo captar: la luz de ese otro lado del río, los brillos de luz mojándose en su agua, el resplandor de una mirada cristalina, un paisaje nocturno que al flash se le hace grande. O los azules de un cielo diferente al de Madriz. O las lágrimas de risa producida por la guasa de unos amigos inigualables. O la sensación de extraño relax ante la compañía de tantos extraños. O el olor a café recién hecho volando desde la cocina hasta la orillita de mi_tu cama. O los malabares ingeniosos y acertados con ingredientes al azar en pos de improvisar comidas. O las cervecitas de al mediodía alargadas hasta media tarde. O el placer de darse cuenta de que nos ha abandonado el tiempo. O la sensación de cuando una distancia se acorta apoyadas en un coche, para saludar al roce y éste finalmente hacer encontrar dos miradas sonrientes. O el olor de un pelo recién lavado. O el abrazo de la toalla aún mojada. O lo genial de hacer reales las vistas de lo que antes eran simples postales encontradas en mi buzón. O el insertarme con gozo en una rutina que no es la mía. O pasear perdiéndome por esa ciudad que para mí nunca podría dejar de ser especial. O el hecho de que a partir de ahora lo sea por otros motivos. O el suspiro de alivio que exhalo al darme cuenta de que, ahora sí, lo he superado. O el arte de Merce cada vez que abría la boca. O el guiño cómplice de la luna el sábado por la noche desde la azotea, anticipándose y sabedora de lo que iba a sucedernos. O la alegría que inyecta una carcajada detrás de otra. O lo oportunas que pueden llegar a ser las canciones que espontáneamente se escapan del radiocasette del baño. O de la tele. O el juego de las casualidades, que no dejará de sorprenderme, de preguntarme por dentro dónde está el truco. O el bienestar de una charla oportuna, sincera, directa y honesta. O el olor a domingo que se colaba por la ventana de la cocina y que hacía tanto que no podía disfrutar. O lo bien que sienta el olvidarse un poco de una rutina que a veces aplasta. O que nos adivináramos los pensamientos, descubriéramos inseguridades, nos entendiéramos los sentimientos y oyéramos nuestros silencios. O lo bien que se explican las canciones ahora que a las palabras les cuesta hacerse entender. O lo fácil que fue que todo fuera tan fácil. O lo mucho que tengo que agradacer y la poca originalidad de la última hora para hacerlo.
Me lo he dejado en Sevilla_tu casa_tu cuarto_tu sábanas_tu sillón_el ascensor_el coche de Tomás_la terracita del Café de la Prensa. Guárdamelo, que querré recuperarlo. Pero te reconozco que me llevo otro poco. De eso y de otras muchas cosas. De mi moranquita sexy, de los dos perros que se dicen cosas en otros lenguajes, de las clases de inglés de mi profe prefe, de los bajos del Guadalquivir, de lo cabroncito y maravilloso que es tu burrito...
Tomo tierra. Llego a Madriz antes de que termine de recordar. Decidido y comprobado: las distancias son una ficción. Vuelvo pensando en volver. Próximas paradas... indefinidas. Fluyen ideas: ¿Bilbao? ¿Sí? Conduzco yo.

7 comentarios:

delirante dijo...

postdata de la autora:
euRia, te debo la postal, no lo he olvidado.
da tiempo a que te llegue, que no será cuestión de mucho ;)

Anónimo dijo...

¿Se te quedó el corazón en Triana como en la canción de Bosé?

Azul_oscuro dijo...

O...tus ganas de cuidarme.o el "¿Laurita, estás bien?".o los bocaos a traición. o los desvaríos de media noche entre carcajada y carcajada.o tu sonrisa y mirada tímidas.o mis ganas.o ...me quedo con buena parte de todo y te dejo lo que quieras para que te lleves...y te lo quedes. Las distancias relativas. Proxima parada, donde gustes...nos llevamos "las alitas" por si tenemos que volar...
Todo y mas aqui para cuando vuelvas...a tu antojo, cuando quieras...
guau!guau!(jo jo jo jo)

delirante dijo...

Carlos, pues ahora que lo dices, por la calle Betis dejé caer un trocito chiquitito. Ay Bosé como sabe lo que se canta...

Azul: tres puntos suspensivos son pocos para tí.
Leyéndote me doy cuenta de la cantidad de cosas que me he dejado sin decir. La rica carne guisada con cariño de una mamá que no es la mía. La nunca descuidada atención. La primera cervecita en El Salvador (por fin!). Las confesiones. Los recuerdos. Compartir_contar_descubrir_enseñar_conocernos en horizontal, vertical, diagonal. Todo y más...

Anónimo dijo...

¿Tú que eres la de las converse rojas o las azules? Curiosidad...
Se te ve feliz, da igual el color. Eso es bueno. ¡Dsfruta tu que puedes que a otras nos está afectando una epidemia de rupturas y desconsuelos!

delirante dijo...

la de rojo, aunque como bien dices, eso es lo de menos.
a veces se nos confunden los colores y ya no sabemos si somos rojo o azul o al revés.

y ánimo con la epidemia, que todo se pasa, que nada es tan grave como parece al principio...

Anónimo dijo...

El Café de la Prensa... uuumm visita obligada cada vez que bajo. Que recuerdos...