Sí, ya estoy mucho mejor.
Y muchas gracias. A todos los que os deis por aludidos en el siguiente audio, especialmente a cuatro personitas -y tienen que ser cuatro...-:
A D., mi eterno compañero de vida, que me sujeta cuando pierdo el equilibrio.
A mi farera, luz guía que nunca se apaga y me alumbra en la penumbra... a pesar de todo.
A mi pequeña, que es sólo y únicamente Ella, mi alma gemela, porque me mantiene feliz cuando menos fuerzas quedan para levantar sonrisas y me da tantas cosas buenas que voy a empezar una colección.
Y a Tiza, mi B1, con la que me fui a mi isla interior y ahora regreso a vosotros, porque sin darse cuenta, me despega del suelo y me hace flotar sin resacas. Después de cinco años y de todo lo que ha supuesto en cada uno de mis giros de espiral, creo que un segundo homenaje se ha más que merecido. Espero que ella y que todos los demás, sepáis perdonarme este brote de delirio fuera de control. No puedo decir que no lo volveré a hacer, pero de momento mis disculpas imploradas.
Gracias, gracias de corazón.
Sonrío con fuerza. Voy pletórica de cosas lindas y de felicidad que repartir. Lo mejor de mí, para vosotros. Ahora sí. Ya sí. Y lo vais a comprobar...
Tiza · Mi isla interior