busca entre mis delirios
viernes, agosto 21, 2009
Irene (II)
A Irene no le gustan los filetes de hígado. Las prisas y la gente con ellas a cuestas. El aburrimiento compartido. El sabor de la pera. El egoísmo. La gente cobarde. El silencio contenido en un orgasmo. Los libros de Bucay. El acento alemán. Las películas de terror. Los cereales cuando se reblandecen en tu taza de colacao. La falsead, la mentira, la opacidad. La impuntualidad. Los que hablan sin conocer. Los chicles de fresa. Las bajadas de tensión. La oscuridad excesiva. Que no le acepten un regalo. El daño gratuito. Los días cortos. El calor húmedo que se te pega al cuerpo. Dormir sola. El tequila. Madrugar. La ropa interior de color carne. La languidez y la gente sin carácter. Darle más de dos vueltas a una misma cosa. La novela rosa. Ismael Serrano. El conformismo y el conservadurismo. Ver la tele. Estancarse, no crecer. Los que no saben pedir perdón. El cotilleo. El helado de ron con pasas. La deslealtad. La Fanta de naranja. Los que no van de frente. La risa forzada. Las bodas. Las ceremonias religiosas en general. Los delirios de grandeza. Los perros chiquititos. Los rizos. El primer día de regla. Las modas. El cine de Bergman. Los gritos. Las manipulaciones. Los que no quieren escuchar y no saben hablar. Limpiar los baños. Los sustos. Los fuegos artificiales. La velocidad excesiva. Joyce. Los que no debaten, convencen. La comida que se queda fría en la mesa. El orgullo. Olvidarse de lo que iba a decir en este momento...
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4 comentarios:
las cosas que a Irene no le gustan, pero a mí sí:
aburrirme con alguien y arreglarlo, el sabor de las peras de agua, el acento aleman de algunos alemanes, las mentirijillas, llegar un poquito tarde, hablar sobre un tema del que no tengo mucha idea y contradecirme, los chicles de fresa, los días buenos que se hacen cortos, el calor húmedo cerca del mar, dormir sola, ver anuncios en la tele, no crecer si no se quiere crecer, el cotilleo sano, las pasas, la fanta de naranja con whisky, las bodas bonitas de gente que se quiere y las bodas por papeles, los delirios de grandeza de ricos venidos a menos, los rizos, me encantan los rizos, el cine de Bergman, los que no quieren escuchar tonterías, los que no saben hablar de sí mismos, limpiar, los sustitos, los fuegos artificiales, que me convenzan por un rato...
no me gusta: llegar a las 7 de la mañana a mi casa, y no tener ni una pizquina de sueño.
A mí me encanta ese ser que se encuentra tras tantas cosas que vive: le gustan o disgustan, pero no deja de llenar con su presencia las grietas grises de esta tierra.
a mí, la Fanta de naranja, me gusta.
A mí Irene cada día me gusta menos.
Quiero a Laura.
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