Hay una ciudad que me cambia la visión de la vida. Es mi secreto mejor guardado. Tiene la capacidad de llegarme a lugares que el ser humano cree que no existen. Barcelona ha sido punto de inflexión en mi vida en muchas ocasiones. La de esta semana, como todas, será irrepetible, inolvidable e impresionante. Lo mejor es que en esta ocasión no ha sido la ciudad en sí la que cambió mi mood diario, fueron ellos. Dicen que no te das cuenta de lo que tienes hasta que lo pierdes. La revisión de ese dicho popular con este viaje es más interesante aún: yo me he dado cuenta de lo que tengo cuando les tuve que decir adiós.
Se me vienen a la mente momentos cesped, el Common People sonando con potencia en el coche mientras ródabamos por la Sagrada Familia, las mil y una conversaciones, los "delunoaldiez", las fotos, los rincones de barna que pocos conocen, risas que aún resuenan dentro, el maravilloso momento meditación en su casa, el japo y la primeriza, la pobreta María, un plan para 2012, los abrazos que renuevan y te evolucionan, las sonrisas que me moría por ver... Ser feliz y reir desde el estómago, sentirse agusto como en mucho tiempo, desear volver, encontrarse a sí misma, mirar a los ojos y ver muchas cosas, esperar repetirlo pronto, muy pronto.
Y... ¿qué más? Que Barna sin ellos no hubiera sido igual. Que lo negro si no ves la luz, no se ve tan negro. Que me habéis hecho aprender un montón. Que vuelvo renovada y con ganas de todo. Que nos debemos esa juerga. Que os quiero.
4 comentarios:
repetiremos.
BEXETS.
tqd!
cómo lo sabes, penny...
será más y mejor y será pronto
besos!!
oleeeeeeeee!!
ya tengo ganassss!!!
mm, esa frase me suena de algo xD
bueno, ya sé lo que es un "abrazo oso" xD
besos!
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